Los seis integrantes de la Expedición 21 comienzan una semana de gran actividad, a partir de la recepción del nuevo carguero ruso Progress M-03M, cuyo arribo se concretó el sábado, llevando unos 2400 kg de suministros.
Entre la carga del Progress se incluye comida, oxigeno, agua, combustible, equipo científico, equipamiento de la estación y artículos para los tripulantes; mientras el carguero, acoplado a la Estación Espacial Internacional, transvasa el combustible a sus depósitos también ejerce las veces de impulsor, al activar sus motores y darle altura a la estación para mantener su órbita.
Los expedicionarios pasarán gran parte de esta semana descargando y acomodando los grandes bultos, en los cuales suelen ir embalados los artículos e insumos, pero además deberán terminar de acondicionar al carguero japonés HTV, llegado el pasado 17 de septiembre, con la carga residual ya que dejará la estación el próximo 30 de octubre.
El mes de noviembre no será menos activo, para ese entonces están previstas la llegada del nuevo módulo ruso MRM-2 y el transbordador Atlantis en su misión STS-129, la cual instalará dos nuevos paquetes logísticos y se llevarán de regreso a Nicole Stott, integrante de la Expedición 21.
La expedición actual está formada por comandante belga Frank De Winne y los ingenieros de vuelo, Robert Thirsk (Canadá), los astronautas de la NASA Nicole Stott y Jeff Williams y los cosmonautas Masim Suraev y Roman Romanenko.
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