El pasado 15 de enero se realizó la primer actividad extravehícular del año, a cargo de los astronautas Tim Kopra (USA) y Tim Peake (Gran Bretaña) integrantes de la Expedición 46.
La tarea principal consistió en el reemplazo de un regulador de alto voltaje, el cual estaba fallando desde noviembre, fue bastante sencillo de realizar, como tareas adicionales se montaron nuevos cables eléctricos, del próximo adaptador de acople, necesario para los futuros vuelos comerciales, tripulados, que arribarán a la estación.
El único incidente se registró, pasadas las cuatro horas de actividad, cuando el astronauta estadounidense, Tim Kopra, notó una acumulación anormal de humedad en su casco, si bien, no significó ningún peligro para su integridad física, el centro de control decidió dar por terminada la actividad preventivamente ya que se trata del mismo traje usado por el italiano Luca Parmitano, en julio de 2013, el cual su casco se inundó de agua y puso en peligro al astronauta, al no poder respirar libremente ni ver con claridad para reingresar a la estación espacial.
Una vez terminada la actividad, el astronauta Scott Kelly y el cosmonauta Sergei Volkok, ayudaron a los caminantes espaciales a despojarse de sus trajes y realizar una revisión y comparación de los mismos. Se está estudiando detenidamente el traje que ya evidenció la misma falla en dos oportunidades.
No hay certeza del impacto de este incidente en las actividades previstas, la próxima caminata está prevista para mayo pero dependerá del informe técnico que se desprenda del traje espacial observado.
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